Ideas para esta semana:
Croquetas
de brócoli
Calabacines
rellenos
Crema
de calabaza y queso
Coliflor
con tomate
Fuente
de patatas gratinadas
Pasta
o arroz con salsa de zanahoria
Las recetas están en pdf pinchando AQUÍ, y también un poco más abajo, desarrolladas, por si no podéis acceder al documento.
CROQUETAS DE BRÓCOLI
Ingredientes
1 taza de desayuno de leche.
2 cucharadas soperas de harina
1 puerro
500 gr. de brócoli
Aceite, sal y pimienta negra o nuez moscada
Huevo y pan rallado.
Elaboración
Lavar el brócoli y cocerlo al vapor, durante 8-10 minutos, o
hasta que los tallos estén
blandos al pincharlos con un cuchillo.
Dejar que se enfríe un poquito y picarlo con un cuchillo.
Reservar.
Lavar el puerro y quitarle la capa exterior y las raíces.
Cortarlo todo lo finito que se
pueda.
En una sartén grande, sofreír el puerro picado con aceite de
oliva (tres o cuatro
cucharadas), y cuando empiece a dorarse, echarle la harina y
remover hasta que también
ésta se dore. Mientras tanto, calentar un poco la taza de
leche para que esté tibia.
Cuando la harina está ya dorada, verter la leche despacio, y
sin dejar de remover, para
que la harina no haga grumos.
Cuando esté incorporada toda la leche, bajar el fuego al
mínimo y remover hasta
conseguir una textura cremosa y uniforme. En ese momento,
incorporar la pimienta o
nuez moscada, mezclar bien e incorporar el brócoli, que
también deberá mezclarse.
Pasar la masa a un plato llano, grande, y extenderla todo lo
posible, para que se enfríe
más rápido.
Las croquetas se deben liar con la masa fría. Si no se van a
hacer en el día, es
conveniente guardar la masa, ya fría, en la nevera, pero
tapada, porque si no se secará
demasiado.
Y para liar las croquetas hay que ir cogiendo trozos de la
masa con una cuchara y
redondearlos ayudándose con otra cuchara del mismo tamaño.
Después hay que pasarlas
por huevo batido, y luego por pan rallado. Una vez que se
cubren con pan rallado se les
puede terminar de dar la forma, redondeada o alargada, como
se prefiera.
Y cuando ya están hechas, se pueden freír directamente, o
congelar.
CALABACINES RELLENOS
Ingredientes para 2 personas_
1 ud. calabacín mediano
2 ud. calabacines pequeños (en
dados)
½ taza arroz integral
2 ud. zanahoria grande en dados
1 puñado soja (brotes)
1 ud. puerro picado
1 cuchara sopera salsa de soja
1 pizca cebolla
aceite (para saltear la verdura)
queso mozzarella laminado, o
cualquier otro que funda bien. Puede ser también rallado.
Hervir el calabacín mediano en agua con sal hasta que esté
tierno. Eso se puede averiguar pinchándolo con un cuchillo o una aguja de
calceta. Sacarlo del agua y escurrirlo bien. Cortarlo en rodajas gruesas, como
de 4 dedos de alto, y vaciarlo con cuidado con un cuchillo o una cuchara.
Dejar las rodajas colocadas en una fuente para horno. Como
almacenarán bastante agua de la cocción, se les puede poner debajo un paño de
algodón limpio o papel de cocina, para que se vaya absorbiendo el líquido
restante mientras se prepara el relleno.
Poner en una cacerola mediana a saltear
con aceite suficiente el puerro, zanahoria y cebolla, y cuando comience a dorarse
toda la verdura, agregar el arroz, darle un par de vueltas hasta que brille, y en
seguida verter una taza y media de agua hirviendo, los dados de calabacín, los
brotes de soja y la salsa
de soja.
Dejar cocinar moderadamente hasta
que se haga el arroz (que se evapore el agua).
Este relleno
se coloca dentro del pozo de los calabacines, y con lo restante se cubre la
superficie de los mismos.
Se distribuyen las láminas de
queso o el queso rallado sobre las rodajas de calabacín, y se ponen a gratinar
en el horno, a máxima temperatura, hasta que el queso se derrita y se dore.
CREMA DE CALABAZA Y QUESO
Ingredientes
Medio kilo de calabaza.
2 puerros medianos.
Una patata pequeña.
50 gramos de cebolla.
Medio litro de caldo de verduras
3 cucharadas de aceite de oliva virgen.
100 gramos de quesos variados.
Pimienta negra y sal
Medio kilo de calabaza.
2 puerros medianos.
Una patata pequeña.
50 gramos de cebolla.
Medio litro de caldo de verduras
3 cucharadas de aceite de oliva virgen.
100 gramos de quesos variados.
Pimienta negra y sal
Elaboración
Limpiamos, pelamos y picamos todos los ingredientes; la calabaza y la patata en dados y la parte blanca de los puerros en aros.
No hace falta que lo cortemos muy fino porque luego los vamos a batir.
En una cazuela ponemos a calentar tres cucharadas de aceite. Cuando esté caliente, a fuego no muy fuerte, incorporamos la cebolla y rehogamos tres minutos para que se rehogue un poco.
A continuación añadimos la patata y dejamos rehogar otro par de minutos. Ponemos también la calabaza, removemos bien y aderezamos con sal y pimienta negra recién molida al gusto.
Cubrimos todo con el caldo de verduras y dejamos que cueza, a fuego lento, durante una media hora más o menos.
Transcurrido este tiempo retiramos del fuego, dejamos templar un poco y lo pasamos por la batidora, batiendo bien para que quede lo más fina posible.
Para eliminar algún filamento que pueda quedar y hacer que resulte más cremosa todavía, podemos pasar a continuación por un colador chino.
Una vez preparada para servir caliente, se sirve en un plato hondo y sobre él se añaden unos dados de quesos diferentes (Roquefort, Idiazabal, Emmental, Gruyere…) y un poco de cebollino picado para dar color.
Limpiamos, pelamos y picamos todos los ingredientes; la calabaza y la patata en dados y la parte blanca de los puerros en aros.
No hace falta que lo cortemos muy fino porque luego los vamos a batir.
En una cazuela ponemos a calentar tres cucharadas de aceite. Cuando esté caliente, a fuego no muy fuerte, incorporamos la cebolla y rehogamos tres minutos para que se rehogue un poco.
A continuación añadimos la patata y dejamos rehogar otro par de minutos. Ponemos también la calabaza, removemos bien y aderezamos con sal y pimienta negra recién molida al gusto.
Cubrimos todo con el caldo de verduras y dejamos que cueza, a fuego lento, durante una media hora más o menos.
Transcurrido este tiempo retiramos del fuego, dejamos templar un poco y lo pasamos por la batidora, batiendo bien para que quede lo más fina posible.
Para eliminar algún filamento que pueda quedar y hacer que resulte más cremosa todavía, podemos pasar a continuación por un colador chino.
Una vez preparada para servir caliente, se sirve en un plato hondo y sobre él se añaden unos dados de quesos diferentes (Roquefort, Idiazabal, Emmental, Gruyere…) y un poco de cebollino picado para dar color.
COLIFLOR CON TOMATE
Ingredientes para 4 personas
1 coliflor de en torno a1 kg .
1 cebolla mediana
150 gr de Jamón serrano en lonchas
200 gr de tomate frito
1/2 vaso de vino blanco
150 gr de champiñones
queso rallado
aceite de oliva
sal
1 coliflor de en torno a
1 cebolla mediana
150 gr de Jamón serrano en lonchas
200 gr de tomate frito
1/2 vaso de vino blanco
150 gr de champiñones
queso rallado
aceite de oliva
sal
Preparación
Cocer la coliflor en ramilletes hasta que esté al dente. Escurrir bien. También se puede hacer al vapor, en cuyo caso no hace falta escurrir.
En una sartén rehogar la cebolla picadita, añadir los champiñones y remover, incorporar el vino blanco hasta que evapore, añadir el jamón y el tomate frito. Rehogar durante 1-2 minutos.
Encender el horno y en una fuente echar la salsa echa anteriormente, colocar la coliflor por encima y echar el queso rallado. Gratinar hasta que esté dorado el queso.
Cocer la coliflor en ramilletes hasta que esté al dente. Escurrir bien. También se puede hacer al vapor, en cuyo caso no hace falta escurrir.
En una sartén rehogar la cebolla picadita, añadir los champiñones y remover, incorporar el vino blanco hasta que evapore, añadir el jamón y el tomate frito. Rehogar durante 1-2 minutos.
Encender el horno y en una fuente echar la salsa echa anteriormente, colocar la coliflor por encima y echar el queso rallado. Gratinar hasta que esté dorado el queso.
FUENTE DE PATATAS GRATINADAS
Ingredientes:
1
kilo de patatas
2 decilitros de leche
1 decilitro de nata liquida
300 gramos de queso emmental rallado
1 cebolla
mantequilla para untar el molde
sal
pimienta negra.
2 decilitros de leche
1 decilitro de nata liquida
300 gramos de queso emmental rallado
1 cebolla
mantequilla para untar el molde
sal
pimienta negra.
Aceite
de oliva
Elaboración
Pelamos las patatas y las cortamos en rodajas de5 centímetros
Las cocemos en una cazuela cubiertas de agua con una pizca de sal y pimienta negra durante 15 minutos a fuego suave. También se pueden hacer al vapor, y salpimentar después. En este caso, el tiempo varía. Lo mejor es comprobar que están tiernas pinchándolas con la punta de un cuchillo.
Elaboración
Pelamos las patatas y las cortamos en rodajas de
Las cocemos en una cazuela cubiertas de agua con una pizca de sal y pimienta negra durante 15 minutos a fuego suave. También se pueden hacer al vapor, y salpimentar después. En este caso, el tiempo varía. Lo mejor es comprobar que están tiernas pinchándolas con la punta de un cuchillo.
Por otra parte, pelamos y cortamos la cebolla en tiras finas, y la sofreímos con el aceite a fuego suave hasta que se ablande.
Untamos una fuente con mantequilla y lo montamos todo como sigue:
1.
Una capa de rodajas de patata.
2.
Queso rallado, cebolla pochada y pimienta.
3.
Otra capa de patatas.
4. el
resto de la cebolla, más queso y pimienta.
5.
Última capa de patatas.
6.
nata líquida, leche y un poco más de queso.
Gratinamos
unos 15 minutos a unos 200ºC ,
hasta que las patatas estén doradas.
PASTA CON SALSA DE
ZANAHORIA
Esta salsa es para combinar con cualquier tipo de pasta que
tenga huecos por los que se pueda colar, para que se mezcle bien. Por ejemplo,
espirales, o caracolas (también se llaman tiburones).
Ingredientes para 4
personas
-
1 kg .
de zanahoria.
-
4 dientes de ajo.
-
2 cayenas pequeñas.
-
1 brick de nata o 200 cl. de leche o queso cremoso.
-
1 sobre de queso parmesano en polvo.
-
Pimienta negra.
-
Aceite y sal.
-
400 gr. de espirales de pasta
Elaboración
Picar el ajo. Pelar la zanahoria y cortarla en trozos
pequeños.
Rehogar el ajo con el aceite y las cayenas enteras (no deben
romperse), y cuando esté dorado, añadir la zanahoria y dorarla también.
Cuando la zanahoria esté dorada cubrir de agua (si es agua
en la que se ha cocido la pasta, mejor que mejor) y echar sal al gusto.
Dejar cocer a fuego medio, con la cazuela tapada, hasta que
la zanahoria esté blanda y se pueda aplastar con un tenedor.
Añadir entonces la nata (o leche o queso) y dejar cocer a
fuego lento, con la cazuela destapada, hasta que reduzca la salsa y quede
espesa.
Retirar las cayenas sin que se rompan y machacar la
zanahoria (también se puede batir con la batidora, pero queda mejor con trocitos).
Añadir la pimienta negra y darle un último hervor.
Mezclar con la pasta, añadir el sobre de queso y remover
bien.
Esta salsa, dejándola más líquida, puede servir para cocinar
arroz. Simplemente rehogar dos dientes de ajo con piel y pasar el arroz por el
aceite, rebajar la salsa con agua y usarla para cocer el arroz, como en una
paella.